Que los primeros años de vida de una persona son fundamentales para el aprendizaje y el desarrollo cognitivo es un hecho. La forma de relacionarnos con un bebé es muy diferente a las relaciones entre adultos por las propias particularidades de un bebé. En este sentido, una de las principales formas que tenemos de establecer relaciones con niños de hasta tres años es la estimulación sensorial. Esta es precisamente, una de las principales técnicas (y una de las más efectivas) a la hora de favorecer el desarrollo intelectual de los más pequeños.
En este sentido, y siendo conscientes de su importancia, en el Colegio Afuera apostamos por la estimulación sensorial en educación infantil.
Estimulación sensorial, clave para el desarrollo intelectual de los niños
Las sensaciones que los niños perciben a través de los sentidos es una de las principales fuentes de adquisición de conocimientos en los bebés. Es decir, prácticamente todo lo que aprenden los niños de hasta tres años procede de las sensaciones que le produce su entorno. Dicho de otra forma, su desarrollo cognitivo o intelectual, depende en gran medida de todo lo que ocurre a su alrededor y de cómo sea capaz de percibirlo a través de sus sentidos.
Un estudio realizado por la UNIR (Universidad en Internet) explica que durante los primeros años de un niño “el cerebro está ocupado construyendo su sistema de cableado”. Un proceso que solo se da una vez en la vida. Es decir, hay que aprovechar este momento donde tiene lugar el desarrollo cerebral para que, desde la escuela infantil, los profesores contribuyan a la generación de nuevos circuitos cerebrales que potencien su crecimiento intelectual.
Principales beneficios de la estimulación sensorial en la escuela infantil
El deseo de aprender de los niños más pequeños y los bebés es una necesidad biológica. ¿Y cuáles son sus principales “herramientas” para el aprendizaje? Pues ni más ni menos que otros seres humanos: sus padres, sus hermanos, y cualquier otra persona que tenga un contacto cercano con él o ella, como por ejemplo los profesores o sus compañeros de aula.
Desde la escuela infantil es posible fomentar la estimulación sensorial de los más pequeños. Para ello es importante contar con instalaciones adecuadas a fin de poder explotar al máximo todos los sentidos de los niños.
Si aún te estás preguntando qué ventajes tiene fomentar la estimulación sensorial en la escuela infantil aquí van algunas de ellas:
- Favorece las relaciones positivas con personas, tanto niños como adultos.
- Incita al pensamiento lógico.
- Propicia que mejore la atención de los niños.
- Aumenta la curiosidad y las ganas de aprender.
- Enseña a tener un mayor conocimiento y control sobre su propio cuerpo.
Cómo favorecer la estimulación sensorial en la escuela infantil
Para favorecer la estimulación sensorial de una forma completa es necesario estimular todos y cada uno de los sentidos.
Por ejemplo, podemos favorecer la estimulación auditiva con el uso de sonajeros, libros musicales, juguetes que simulen los sonidos de los animales, etc.
Para favorecer la estimulación visual podemos recurrir a espejos, juegos con sombras, reflejos, luces…Todos estos elementos les llaman mucho la atención despertando su curiosidad.
Se puede favorecer la estimulación del sentido del tacto trabajando con diferentes materiales como papel, plastilina, arena, objetos de diferentes texturas, pero también con sensaciones de frío y calor, por ejemplo…¿Qué mejor manera de sentir el frío que tocando, por ejemplo, la nieve?
Desde la escuela también se puede ayudar a desarrollar el olfato ofreciéndole diferentes aromas, desde los propios de determinados alimentos durante las comidas, como el de diferentes flores, sin ir más lejos.
Y, por último, y no por ello menos importante, desde la escuela infantil también es posible trabajar o favorecer la estimulación gustativa. Aprovechar épocas del año para dar de probar nuevos sabores a los niños, como por ejemplo la Navidad, es una técnica que resulta muy útil y atractiva. Para la estimulación gustativa también es aconsejable dar de probar diferentes alimentos a los niños de sabores más o menos fuertes, distintas texturas, etc. De esta forma ayudaremos a controlar el babeo, mejorar la succión, masticación y deglución.
Si quieres saber más en detalle cómo trabajamos la estimulación sensorial en la escuela infantil de nuestro centro, ponte en contacto con nosotros y te ampliaremos la información con mucho gusto.